¿Sabes que el primer acuerdo internacional con el objetivo de lograr la igualdad entre hombres y mujeres se firmó en 1945?
Aunque se han conseguido muchos objetivos, aún quedan otros por lograr.
En el haber, por ejemplo, está el derecho al voto, a la eliminación de barreras y prejuicios ante los puestos de trabajo, una mayor sensibilización y reconocimiento de las tareas que la mujer lleva a cabo diariamente, la cuestión de la conciliación entre vida personal y laboral, y la participación del hombre en las tareas domésticas con igual grado de responsabilidad e implicación, etc.
En el debe aún hay quien no considera ni trata a la mujer con principios claros de respeto e igualdad, y se empecina en mantener clichés que claramente pertenecen a otra época. Los mismos aspectos mencionados arriba nos sirven para esta sección de objetivos aún pendientes ya que todas esas demandas no han hecho más que empezar a aflorar, y todavía hará falta tiempo y sobre todo mucha educación para que no hagan falta más reivindicaciones.
Por supuesto las cotas de maltrato y violencia contra las niñas y las mujeres que se asoman a nuestro día a día en cualquier momento, situación y lugar, son simplemente intolerables y rechazables sin excusas, sin argumentos, sin atenuantes... porque una civilización no puede progresar sometiendo e ignorando al 50% de su población, que además no está dispuesta a ser ninguneada.
Más información en las páginas de la UNESCO
Aunque se han conseguido muchos objetivos, aún quedan otros por lograr.
En el haber, por ejemplo, está el derecho al voto, a la eliminación de barreras y prejuicios ante los puestos de trabajo, una mayor sensibilización y reconocimiento de las tareas que la mujer lleva a cabo diariamente, la cuestión de la conciliación entre vida personal y laboral, y la participación del hombre en las tareas domésticas con igual grado de responsabilidad e implicación, etc.
En el debe aún hay quien no considera ni trata a la mujer con principios claros de respeto e igualdad, y se empecina en mantener clichés que claramente pertenecen a otra época. Los mismos aspectos mencionados arriba nos sirven para esta sección de objetivos aún pendientes ya que todas esas demandas no han hecho más que empezar a aflorar, y todavía hará falta tiempo y sobre todo mucha educación para que no hagan falta más reivindicaciones.
Por supuesto las cotas de maltrato y violencia contra las niñas y las mujeres que se asoman a nuestro día a día en cualquier momento, situación y lugar, son simplemente intolerables y rechazables sin excusas, sin argumentos, sin atenuantes... porque una civilización no puede progresar sometiendo e ignorando al 50% de su población, que además no está dispuesta a ser ninguneada.
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